El papel satinado se caracteriza principalmente por su brillo y suavidad. La mejor manera para distinguirlo es el tacto. Este papel se diferencia de otros por la ausencia de asperezas, poros y por su gran suavidad. Tiene textura lisa, acabado brillante o mate y reproduce fielmente el color en impresiones.
Así mismo, el papel satinado pasa por un procedimiento específico por el que obtiene mayor resistencia. Gracias a este método, los papeles satinados presentan una gran durabilidad y resistencia a las roturas. Además, su acabado tan liso y suave lo convierte en una opción muy elegante. Se trata de un papel económico y con opción brillo-mate.