Si te dijéramos que el 80 % del impacto ambiental de cualquier producto tiene lugar durante las primeras fases del diseño del mismo, ¿qué pensarías? ¿Has escuchado alguna vez el término diseño gráfico sostenible?
El diseño gráfico sostenible es una tendencia en muchas empresas que va de la mano de la concienciación ecológica. Busca adentrarse en cuestiones externas relacionadas con el medio ambiente, pero también en el uso de materiales durante su ciclo de vida, reutilizables y, de los que se puedan sacar el máximo rendimiento. El diseño gráfico sostenible cumple con las necesidades del mercado actual, sin dañar el mercado o las generaciones del futuro.
¿Qué debe hacer el diseño gráfico sostenible?
Arquitectura, urbanismo, diseño del entorno o ambiental, diseño de moda, de interiores, gráfico o ingeniería son algunas áreas donde el carácter sostenible gana adeptos. Para lograrlos, hay que ser congruente con lo que busca.
Reducir el impacto al medio ambiente
La sustentabilidad del diseño gráfico contempla entre sus manuales de operación el posible impacto que tengan los productos que elabore, como etiquetas, embalaje, publicaciones, papel y publicidad gráfica, entre otros. Para lograr el objetivo, debemos usar elementos que lo faciliten, transporte ecológico, eliminación de residuos, tipos de usos del producto, soportes y, por supuesto, la mano de obra.
Estrategias para este diseño
Deberemos tener en cuenta los hábitos durante el diseño en la propia oficina, como la selección de las imprentas con las que trabajar, materiales naturales y reciclables, elegir los proveedores cercanos para evitar el uso del transporte, analizar cómo emplear menos materias primas, etc.
- Reducción del impacto dentro de la oficina. Analizar nuestro entorno de trabajo y necesidades para elegir las mejores opciones: bombillas de bajo consumo, papel reciclable, apagar los equipos que no se utilicen, dejar pasar la luz del sol en lugar de emplear la artificial, reorganizar la política de horarios de trabajo para evitar consumos excesivos de energía, etc.
- Seguir una visión holística. Como diseñadores gráficos, debemos contar con visión holística, es decir, que debemos analizar el ciclo de vida del producto a la hora de diseñarlo. Una vez diseñado, debemos ser muy estrictos con el impacto que la producción, comercialización, distribución y uso pueden tener sobre el producto. Debemos anticiparnos al futuro.
- Elección de insumos. El papel y las tintas, elementos fundamentales para el diseñador gráfico, son también claves. Una selección u otra incide en el coste del diseño. En el caso del papel, se puede elegir uno sin cloro, reciclado o ecológico. La reducción del impacto medioambiental será grande, especialmente si, aunado a esto, reducimos el uso del papel al necesario. En las tintas, las de origen vegetal son ideales para lograr el objetivo. Claro, la elección del papel y la tinta no debe mermar la calidad gráfica.
- Sistema de embalaje. A la hora de diseñar el producto, también hay que hacer lo propio con el embalaje. Reducir la contaminación en este aspecto es importante. Diseñar considerando las posibilidades que brinda el embalaje biodegradable es una magnífica opción para reducir el impacto negativo.
- Política de proveedores. Debemos asegurarnos de que el proveedor tenga también una visión sustentable en cuanto a fabricación de insumos y productos. Valoremos la política laboral en este sentido para trabajar juntos por un mejor mañana.
Ahora que ya conoces un poco más sobre cómo desarrollar un diseño gráfico sostenible, te invitamos a que lo hagas en tu ámbito de trabajo. No es difícil; solamente es necesario que te pongas las pilas, crees una conciencia medioambiental y te autoexijas disciplina para lograrlo. Tus clientes y el planeta te lo agradecerán.
En Aries te ayudaremos a crear tu estrategia de comunicación respetando el medio ambiente. Para hacerlo, simplemente contacta con nosotros y nos pondremos a trabajar en tu caso. ¡Te esperamos!
