¿Cómo puedes definir correctamente al público objetivo de tu negocio? La respuesta a esta pregunta te puede ayudar a aumentar tus beneficios fácilmente, pero ¿por qué es tan complicado acertar a la hora de crear una ficha de un cliente-tipo?
La importancia de elegir el target de tu empresa
Parece imposible crear una campaña de marketing para vender un producto sin saber a quién va dirigida exactamente. Para evitar problemas deberías analizar los siguientes factores.
¿Has realizado el análisis demográfico correspondiente de las personas que visitan tu sitio web?
Si te limitas a ver cuántas personas han visitado tu sitio o cuántos seguidores tienes en una red social no vas a lograr nada. Usa herramientas como Google Analytics o Facebook Insights para descubrir el grupo de edad y el país de procedencia de la mayoría de las personas interesadas en tu propuesta.
¿Realizas encuestas de forma habitual?
Son esenciales para conocer también sus aficiones y cómo se comportan tus clientes potenciales. No dejes de entrar en las redes sociales, en los foros o en los blogs que te faciliten para conocer qué buscan exactamente y cómo quieren adquirirlo.
Escoge el estilo de tu campaña
Para conquistar a un cliente potencial debes hablar en su mismo idioma, con un punto de vista similar y sin que se note demasiado que tu último objetivo es venderle algo. Es decir, tu campaña no puede ser la conjugación de los verbos comprar o vender, sino algo dinámico, que les aporte valor, que les anime a interesarse por tu oferta y que les dé algo que no tienen
Recomendaciones para pasar a la acción
Con toda la información anterior debes crear un retrato robot de tu clientela y comenzar a trabajar poniendo en práctica las siguientes recomendaciones.
Prueba tu campaña antes de su lanzamiento definitivo
Los perfiles en las redes sociales de tu empresa pueden convertirse en el mejor laboratorio para ensayar. Lanza al menos dos anuncios con una estética distinta para comprobar cuál es el que recibe mejores valoraciones, siempre teniendo en cuenta que cada red social tiene un público determinado. Además, no olvides apostar por una imagen que explique el concepto de un simple vistazo.
Nunca dejes de investigar
No creas que porque realices una campaña exitosa vas a poder repetir la aceptación en la siguiente. Tus clientes pueden ir cambiando casi a diario, por lo que debes siempre repetir el proceso arriba indicado para que cada nueva oferta sea lo más ajustada posible al perfil de ese cliente que quieres captar.
No pierdas de vista a tu competencia
Si a las empresas de tu nicho de mercado les va muy bien y a ti no es porque fallas en algo. No se trata de que copies lo que hacen, pero sí de que leas la opinión de su clientela y que adoptes esa actitud para seguir creciendo.
El peligro de no definir a tu público objetivo
Incluso si comercializas todo tipo de productos, siempre vas a necesitar hacer promociones específicas para vender una serie de artículos. Tu oferta no le interesa a todo el mundo y ya no existen las campañas generalistas, sino todo lo contrario.
Tu cliente potencial ha de sentirse especial al mirar su teléfono móvil y encontrar que has creado la oferta que tanto necesitaba. Ahora, tu publicidad entra en la vida de cada persona y para que sea efectiva debes conseguir personalizar al máximo tu oferta. Solo así lograrás aumentar la fidelización y mejorar los niveles de conversión de tu empresa.
No lo dudes. Definir a tu público objetivo antes de cada campaña de marketing es la mejor opción para lograr la máxima efectividad posible.