Se considera una prueba de impresión a aquellos documentos que sirven como comprobantes antes de realizar la impresión final.
En bastantes ocasiones estas pruebas se realizan de forma digital. Pero en esta ocasión veremos aquellas que se realizan impresas.
En rasgos generales se diferencias en dos tipos de pruebas de impresión:
Las pruebas de color, que analizan el color fiel con el que se imprimirá el trabajo.
Mientras que las pruebas de maquetación, analizan que todo esté donde tiene que estar. Que no haya habido erratas, imágenes mal colocadas, o tamaños indeseados.
Aunque ambas son útiles, la más necesaria es, sin duda, la prueba de color.
Conseguir una alta fidelidad del color es fundamental en la impresión de cualquier material publicitario. Un pequeño cambio puede influir notablemente en el mensaje a transmitir, o en las ventas del producto. No cabe duda de que supone un aspecto esencial, sobre todo para el reconocimiento de marca.
Es muy importante para los diseñadores tener en cuenta las diferencias que existen entre los monitores y la impresión. Ambos espectros de color provienen de dos fuentes totalmente diferentes RGB frente CMYK. El RGB crea los colores de forma aditiva, ya que la fuente de luz que da color a los píxeles es blanca. Mientras que la impresión se consigue gracias a los colores sustractivos.
¿Cómo se realizan las pruebas de impresión?
Cuando hablamos de impresión offset, las pruebas de forma ideal se realizan con la misma máquina con la que posteriormente se imprimirá. Con este método obtenemos una altísima fiabilidad.
Pero el inconveniente es que supone un coste muy elevado, por la puesta en marcha de la máquina, las preparación de planchas… etc.
Gracias a la evolución de la tecnología se han desarrollado de forma magnífica las pruebas de color digitales.
Éstas pruebas son muy sencillas, consisten en la impresión desde un archivo informático. Esta impresión se realiza desde una impresora digital destinada para ello. Tal como ocurre en las pruebas de offset se pueden realizar sobre papeles especiales.
Las técnicas más utilizadas actualmente para la obtención de las pruebas de color son las mismas que las de las máquinas digitales: láser, inkjet o sublimación.
En Aries contamos con un departamento dedicado a la correcta puesta en marcha de los proyectos. Ofrecemos tanto pruebas de maquetación como pruebas de impresión siempre que el cliente lo desee. Pero se ha de tener en cuenta que esto ralentiza mucho el proceso. Y que gracias a nuestros altísimos estándares de calidad, el margen de error sin su realización es mínimo.
Nuestra recomendación es comentar todas las necesidades con nuestro departamento técnico. Ellos se encargarán de solucionar todas vuestras dudas.
